Fallado el CONCURSO RELATOS «VÍCTOR CHAMORRO» 2025 a favor de Antonio Luis Vicente Canela
La vida del teniente coronel Canela: entre las operaciones especiales en Irak y la poesía en Alicante
Donde dije digo...
DE NUEVO LA BANANA
«Gente gorda»
¡Qué dura es la vida!
DESARME, ALTA VELOCIDAD Y…SUS CONSECUENCIAS
DINKS
Calafatear
Las elecciones y el «Efecto Casandra»
«Hasta el último ucraniano»
A la Bandera le da igual
As bestas
El Día de la Marmota
«Cambalache»
Los Reyes Magos y el anarquismo
¡Si hubiéramos ganado el Mundial!
Acción de Gracias
Fútbol y Derechos Humanos
¡Oiga, yo ni un duro…!
Querido Pablo
Los Cinco
Unidas...ya no Podemos
Proponer o no proponer...
El cencerro
La V invasión vikinga
El Metaverso
Transporte público
El Silbo gomero
El Emérito ¡eh!
Vaya racha
El faltoso
Un pelotón de soldados
No a los polvorones
Voluntad de Vencer
Habitación “suite”
Efecto Tanxugueiras
No queda, solo hay fila quince y detrás de la columna.
La "mesa" de Putin
Ponnos un güisqui
FILOMENA: EL FIN DE UN MITO
EL NEGOCIADOR QUE LO NEGOCIE...
NO SE PREVIÓ
FISCALIDAD PROGRESIVA
HACE MUCHO CALOR
EN MANOS DE DIOS
KEEP PRESING
PALABRAS PARA UN FIN DEL MUNDO
SHORT METTING
QUE LE PONGAN UN CRESPÓN A LA MEZQUITA…
La Izquierda española y posmoderna, ya no lleva barba. Y mira que la barba y la Izquierda han hecho siempre buenas migas. Marx, Engels, Castro, y la barba que, aunque algo rala, es la más famosa de todas: la del Che. Pero Ni Felipe González, ni Pedro Sánchez, ni Zapatero…han llevado barba, y la de Pablo Iglesias yo creo que realmente no cuenta como barba, aunque lo compensa con la melena setentera. Ahora la barba es atributo de la Derecha: Rajoy, Casado, Abascal, y Rivera porque no le sale. Y es que ahora las derechas y las izquierdas se pasan el día quitándose cosas: que tú me quitas la bandera, pues yo te quito el feminismo; que tú te quedas con los LGTBI, pues yo me dejo la barba.
La barba es atributo de varones, y de hembras que fueron en su tiempo atracción de feria de pueblo; y aunque culturalmente tiene mucho más recorrido que el que podemos dedicarle en estas líneas, siempre se relacionó con la virilidad y por extensión con la fuerza que se le suponía al macho y su capacidad de combate frente a otros machos. Y es que la barba (y en general todas las pilosidades corporales) nos recuerda cruelmente nuestra esencia animal; sale para afirmar la condición de macho y eso a la Izquierda posmoderna en una época en la que el hombre está por decidir si va o viene, no le gusta. La barba los sitúa en un contexto demasiado radical, como de depredadores de huevos de gallina violada.
Yo creo que las próximas elecciones (todo apunta a que ya serán irremediables) van a ser un duelo donde las barbas tendrán mucha importancia. Los candidatos se miraran de lejos, verán el volumen de la barba de su adversario, y calcularán si hay hueco entre la barba y la yugular para morder.