Fallado el CONCURSO RELATOS «VÍCTOR CHAMORRO» 2025 a favor de Antonio Luis Vicente Canela
La vida del teniente coronel Canela: entre las operaciones especiales en Irak y la poesía en Alicante
Donde dije digo...
DE NUEVO LA BANANA
«Gente gorda»
¡Qué dura es la vida!
DESARME, ALTA VELOCIDAD Y…SUS CONSECUENCIAS
DINKS
Calafatear
Las elecciones y el «Efecto Casandra»
«Hasta el último ucraniano»
A la Bandera le da igual
As bestas
El Día de la Marmota
«Cambalache»
Los Reyes Magos y el anarquismo
¡Si hubiéramos ganado el Mundial!
Acción de Gracias
Fútbol y Derechos Humanos
¡Oiga, yo ni un duro…!
Querido Pablo
Los Cinco
Unidas...ya no Podemos
Proponer o no proponer...
El cencerro
La V invasión vikinga
El Metaverso
Transporte público
El Silbo gomero
El Emérito ¡eh!
Vaya racha
El faltoso
Un pelotón de soldados
No a los polvorones
Voluntad de Vencer
Habitación “suite”
Efecto Tanxugueiras
No queda, solo hay fila quince y detrás de la columna.
La "mesa" de Putin
Ponnos un güisqui
FILOMENA: EL FIN DE UN MITO
EL NEGOCIADOR QUE LO NEGOCIE...
NO SE PREVIÓ
FISCALIDAD PROGRESIVA
HACE MUCHO CALOR
EN MANOS DE DIOS
KEEP PRESING
PALABRAS PARA UN FIN DEL MUNDO
SHORT METTING
QUE LE PONGAN UN CRESPÓN A LA MEZQUITA…
Es urgente que el independentismo catalán y especialmente su adalid, ilustren ya al mundo sobre hacia dónde hay que mirar, para ver con claridad el camino a seguir en nuestro errático vagar. Si resulta que la libertad, la democracia y la justicia no residen en España, tampoco en la Europa comunitaria donde todos los países miembros se han confabulado contra ellos; si el resto de naciones del orbe no los apoya porque responden exclusivamente a espurios intereses de… bueno, espurios. Entonces ¿hacia dónde ir? ¿dónde está el modelo?
Y es que el independentismo olvida (perdón me he “pasao”: no se puede olvidar aquello que se ignora), que en los estados, la justicia, la democracia y la libertad, no vienen determinadas nunca por la forma del estado, sino por el cumplimiento de los deberes del poder. (Samuel Pufendorf).
Esa pretendida ausencia de libertad, a la que constantemente aluden, olvida también que las acciones humanas sólo son verdaderamente libres cuando se vinculan a una norma o a una ley superior desde la que se puede apreciar la bondad o maldad moral de la acción. Así, la ley, su cumplimiento, es una base insustituible, ya que sin ella la condición natural del hombre es tan solo social y no política. El paso a la comunidad política se produce sobre la base de la jurisdicción y la fuerza coactiva de las leyes. (Francisco Suárez).
Pero el conjunto de las ideas que sustentan al independentismo ha optado por la simplificación y la exageración; no es de extrañar, ya que ambas son características de las doctrinas oficiales enseñadas en forma de catecismo. Cumplen así la norma de que las teorías que quieran convertirse en ideologías de un movimiento político o en la doctrina oficial de un estado, deben prestarse a la simplificación para el beneficio de los simples y al comentario sutil para halagar a los sutiles. De tal forma que han conseguido que la atención haya pasado (como decía Kaplan) del contenido a la forma, y resulta que la virtud se ha convertido ahora en la ejecución correcta de una secuencia fija de actos.
Y mientras tanto, el expresidente Puigdemont ha hecho suya la frase que Cesar Borgia grabó en la hoja de su espada: “Aut caesar aut nihil”; y a la manera de un líder bananero opta ahora por intentar perpetuarse en el Poder.