- Ave María Purísima.
- Sin pecado concebida.
- Padre hace tres meses que no me confieso.
- Bueno hijo, hay que venir a hablar con Dios más a menudo, pero bien está, bien está; y en este tiempo…
- Pues, la verdad, sobre todo malos pensamientos.
- Cuéntame hijo, cuéntame.
- He pensado muy a menudo en el Procés, y, claro, como ahora lo han declarado ilegal…
- ¿Cuántas veces hijo?
- Pues días ha habido que tres y cuatro veces. Es que como en los medios no paran, pues es difícil resistirse.
- Ya, ya. Sigue hijo mío, sigue.
- Y eso no es lo peor. Porque ahora estoy pensando en cometer actos impuros: ¡estoy pensando en ir a votar!
- Tienes que pedir mucha ayuda a Dios. Es una tentación que te envía para probar tu fortaleza. Pero ¡tienes que luchar! Él está a tu lado y en los momentos de debilidad…te ayudará.
- Ya, ya. Pero padre, Dios ¿de qué lado está?
- Dios está con el amor; Dios está con la bondad, con la caridad, con la fraternidad. Dios ama por igual a todos sus hijos. Cristo dijo: “dad al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios”.
- Y el César ahora es…claro, es…; si…ya veo. Pero…es que eso no me ayuda mucho. ¿No podría ser un poco más concreto?
- No hijo, no puedo, porque como aquí no sabemos muy bien qué va a pasar pues hay que estar al caldo y las tajadas ¿eso lo entiendes?
- ¡Hombre padre!
- Bueno pues nada. De penitencia vas a estar quince días sin poner la TV3 y cada noche una hora como mínimo de 13TV. Y recuerda que además tiene que haber “propósito de la enmienda”, si no, no vale la penitencia. Vete y no peques más.
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